Livi en la final

Si Mercedes Milá comienza así, ¿Por qué yo no? jajajaja. ¿A alguien se le ocurre una mejor forma de empezar que con los oblicuos? Esos que ya está recuperando en la nueva casa. Mercedes no pierde oportunidad, tío que sale, tío que manosea. Muchas veces pienso que es lo que más le gusta de Gran Hermano, siendo sinceras, ¿Y a quién no? Aquí el momento oblicuos:

Después de este momento rompebragas alegravistas voy a la gala en cuestión que tuvo mucha miga y que no sé ni por donde coger. Gala llena de emociones, unas buenas, otra no tan buenas. Sufrimos y disfrutamos por igual. La alegría por verle finalista se mezcló con el sufrimiento de una entrevista difícil de tragar. Ayer fue muy difícil controlar las lágrimas. Aviso de antemano, creo que a veces las imágenes hablan solas, hoy van más capturas que palabras.

Las primeras emociones de la noche llegaban de mano de las madres, ¡Qué mensajes! Primera vez en la noche que mi corazón se ponía en un puño. En esta ocasión era Pepe. Ya me emocionó verle la tarde del domingo cuando intentaba esconder su emoción tras unas gafas de sol en el salón. Aunque se pusiera mil gafas no podría esconder nada. Y Anoche el momento del confe cuando lo escuchaba... Uff. Sentimiento puro. Emoción a raudales. Ver a un hombre tan emocionado con su madre encoge el estómago a cualquiera. El día que escribí que Aless era el corazón de la casa y que en esa casa había grandes corazones e incluí el de Pepe me dijisteis muchas que en eso no estabais de acuerdo. Si con estas imágenes seguís pensando así es que las gafas que se puso Pepe las necesitas pero graduadas.  

¿Y qué me decís de Carmen? Esa madre que cada vez que habla con su hijo termina llorando, tiene una forma de hablar que me causa una ternura infinita. Desde la primera vez que la vi en televisión hace ya unos meses tengo debilidad con ella. Y por supuesto ese Ciccino con cara de pillo y feliz escuchando a su "Ma".

La gala siguió y la sala de expulsiones esta vez me produjo una mezcla de sensaciones raras y encontradas. Por un lado feliz de saber que Aless era finalista, por otro lado al verles tan tristes y sobre todo pensando que era expulsado me daba mucha penita. Cuando volvieron a la casa la cara de Pepe y Pipi era un poema. Todos apenados, estaban convencidos que se había ido, de ser así se hubiera ido una gran persona. Lo sabemos fuera y lo saben dentro. Esperando ya ver el reencuentro con los siguientes finalistas, seguro que son momentazos. 

Aless camino del plató, ahí le esperaba una entrevista complicada. Sin vídeos de sus grandes momentos. Sin vídeos de sus momentos divertidos y sus grandes conversaciones con los mosqueteros. Ni siquiera le pusieron vídeos de sus grandes bailes ni de las pruebas. Estoy segura que el resto los tendrán. Aless lo merecía, él es grande. No voy a entrar al detalle de los vídeos que vio. Solo diré que me sobró uno, no era necesario y estaba fuera lugar, que fue el de Mercedes preguntando en la grada de ex-concursantes. Todos sabemos lo que vio así que voy a entrar en su reacción. 

Chapó por él. Anoche le echo un par, ese par que la Sra. Alcaide se ha encargado varias veces de decir que no tiene. Fue claro, cristalino. Y es que está claro que lo que duele no son los hechos sino el engaño, la mentira. La mentira de alguien con quien estaba empezando a tener algo, pero que eso es lo de menos, lo importante es la mentira. Mentiras que tuvieron muchas oportunidades en la casa de transformarlas en verdades, pero no ocurrió. Fue coherente con lo que dijo aquella vez en el vestidor y coherente con sus palabras del confesionario. Estuvo enorme, sufrió mucho y su cara iba cambiando por momentos. 

Él ha dicho después que los gritos que le llegaban desde fuera le hicieron pensar que sus dudas sobre la mentira eran alucinaciones suyas. Y es que, a ver si de una vez por todas insonorizan esa casa, está claro que los gritos, sean como sean, están de más. Tanto los gritos que le confesaron la verdad como los gritos que le hacían pensar lo contrario. Eso no es sano para nadie. Ya de los que van a insultar mejor ni hablar. 

No esperaba otra reacción ante esas imágenes por su parte. No sólo no me decepcionó sino que me reafirmó lo grande que es. Y no, no disfruté con ello, sufrí con su sufrimiento. Afrontar esa entrevista es un trago muy difícil de pasar. 

Él no solo sufría por todo lo que estaba viendo, por el engaño sufrido, sino que delante de esa cabina veía a su familia sufrir, veía a su madre y a su abuela llorar. Esa abuela que momentos antes de que llegara su nieto le enseñaba una medallita a Mercedes. Grande la Nona gallega. 

Pensaba poner las frases que dijo anoche, algunas tan sorprendentes como directas, tan increíbles como respetables. Me quedo sólo con que él sí tiene educación, lo ha demostrado tantas veces que volver a hacer hincapié en eso es tontería. Así que voy a poner sus caras y las de Conchi, las capturas hablan solas. 

Sigo sin entender como hay gente que no le perdona que no perdonara. Curiosa contracción. No sólo eso sino que ante ello se leen cantidad de insultos y barbaridades. No voy a perder el tiempo con ello. No lo merecen. 

Llegó el momento de la despedida de la casa, todavía seguía pensando que estaba expulsado y fue una despedida bonita. Sus mosqueteros muy nerviosos. Pepe lleva preguntando desde anoche si alguien se acuerda de las palabras exactas que le dijo su "Alexander" y es que, con los nervios y la emoción era incapaz de recordarlas. Decía que le quería decir tantas cosas que al final no se enteró de nada. Grande Alessandro. Grande Pepe. Me quedo con esta pareja de amistad, junto a Hugo. De madrugada me resultaba curioso ver como el uno se acordaba del otro estando tan cerca. Como Aless hacía cuentas con Marta en lo que tardarían en ver a Pepe y como Pepe hablaba con Pipi de Aless. Se admiran, se respetan y se quieren. Para muestra un botón. 

Lo bueno estaba por llegar, mis ojos empezaban a estar brillantes con la despedida, pero cuando Mercedes le dijo eso de: tengo algo más que decirte. Y él decía: ¿Bueno o malo?. Bueno decía ella, ¡tú paso en Gran Hermano no ha terminado, de hecho no estás expulsado, la gente no ha votado para echarte sino para hacerte el primer finalista de Gran Hermano!. Ahí exploté a aplaudir y a llorar. Creo que por mil veces que vea esas imágenes, mil veces que lloraré. ¿Se puede tener más autenticidad y agradecimiento en una reacción? ¿Se puede ser más humano y más humilde? Sí su sufrimiento anterior me hizo sufrir, su alegría de este momento me hizo vibrar de felicidad. Explicar con palabras ese momento es tremendamente complicado. Una vez más, las imágenes hablan solas, ahí van. 

Por si fuera poca la emoción quedaba el momento clave, le comunicaban que tenía que elegir a un +1. La opción de David demostró en él, una vez más, un gran corazón. Hubiera estado genial ver a David, hubiera estado genial que tuviera una segunda oportunidad, aunque entiendo los motivos de la negativa. El gesto fue maravilloso. Le pedían otra persona, casi ni dudó: Martita. Mercedes decía: ¿Has dicho Martita? (creo que en ese momento Mercedes entró en climax), no sólo Mercedes. Los que hablasteis conmigo antes de la gala y me preguntasteis cual era mi opción creo sabéis como me sentí. Marta en su paso por la casa muchas veces me cargaba, no lo negaré, pero otras veces me encantaba. Sobre todo me parecía la niña más coherente de ahí dentro, la que mejor usaba la cabeza con el corazón. Aconsejó mil veces a Pipi bien, escuchó a todo el que lo necesitaba con cordura. Sus llantos me superaban pero la Marta que piensa y habla con cordura me gusta mucho. Creo que aunque le fallen a veces las formas el fondo que tiene es bastante bueno. Ella no lo esperaba, su reacción fue fantástica y cuando entró en la casa transmitía felicidad sincera y agredecida, como pocas. Pepistas, desde el cariño, lo siento mucho, pero Martita es nuestra jejejeje. Besitos. Como no puede ser de otra forma en el blog de hoy, imágenes que hablan solas. 

Hoy me despedido con dos cositas. La primera me la pide el corazón. No la he nombrado hasta ahora ¿pensabais que me había olvidado de ella? Eso es imposible. No se puede ser más guapa y mejor persona. Si pensáis que mi "Livi" favorito es Alessandro estáis confundidos. Mi favorita estaba anoche en la gala, radiante y nerviosa. Sufrió mucho, demasiado. La pobre no se libra, cuando no sufre por ataques twitteros inmerecidos sufre con su hermano, cuando no con su madre, cuando no por todo junto. Es sencilla, es auténtica, es genial. Carácter italo-gallego que enamora. Mujer con principios, con valores y que cada día aprende algo nuevo, los otros Livis muchas veces le dejan con la boca abierta. Me encanta, que diría Piero. Me hace reír en infinidad de ocasiones y me duele cuando la veo mal. Hoy sé que, aunque su hermano está en la final, ha sido un día duro para ella. Le mandaría desde aquí mi apoyo, mi animo y mi cariño pero quedaría demasiado empalagoso. De este Gran Hermano me quedaré con lo bueno, siempre lo he dicho, con las grandes personas, tanto las de dentro de la casa como las de fuera, pero especialmente me quedaré con ella. Me quedaré con la GRAN (en mayúsculas) FRANCESCA. ¡GUAPA!

Y por último y no menos importante, me encantó ver ayer a las 6 de la mañana a Aless dando las gracias por todo el apoyo recibido. Aquí la captura del blog, sé que ya está subido pero me gusta más verlo así, el original. Cómo borraba y escribía porque no le terminaba de convencer nada, con Martita al lado dando su opinión. 

Muchas gracias a todos. Gracias a todos los que habéis conseguido que tengamos al niño al final. Gracias a @PatriciaRevuel por su gran colaboración con las capturas y gracias también, por lo mismo, a @Vane_Gon_San y a @VivaPepeFlores. Gracias a todos los que os pasáis por aquí y gracias a toda la gente que entra desde el minutado, sé que no sois pocos. Anoche fue un subidón leer vuestros comentarios hacía Aless. Me fui con ese sabor de boca a la cama. 

Hoy más que nunca: UNO PER TUTTI E TUTTI PER UNO.